Os animo a participar a esta segunda edición de este encuentro sobre manejo de la rabia.

Pueden asistir tanto las personas que participaron en Noviembre como aquellas que deseen incorporarse ahora, ya que está diseñado de forma que sirva para ambos.

Repasaremos y ampliaremos la teoría acerca de la rabia y las propuestas sobre cómo manejarla.Y dedicaremos una parte a ejercicios corporales procedentes de la Terapia Corporal (Biosíntesis) muy útiles para el trabajo con esta emoción.

Es necesario acudir con ropa cómoda.

 

El manejo de la emoción RABIA (enfado, ira, irritabilidad....) suele ser motivo de dificultad en nuestra vida cotidiana.Muchas de las personas que optamos por un camino de desarrollo personal, o que simplemente tratamos de vivir cada día más "tranquilos" nos encontramos con alguna o varias de estas cuestiones:

" Me cuesta controlar el enfado"

"Acaba saliendo contra quien no tiene que salir"

"Salto, y después me siento culpable"

"No debería tener esto dentro de mi, hay algo dentro que está mal"

"Por mucho que razono desde la cabeza que no es lógico, me sigo enfadando"

"Descargo contra mis seres queridos"

"No sé si es bueno que reprima esto, o que lo libere"...

 

Asociamos esta emoción con descontrol, tristeza, destrucción, daño, culpa... y buscamos la manera, en general, de que "desaparezca" de nuestras vidas.

En este taller, me gustaría invitaros a tener una primera aproximación a una vía diferente, más sana y funcional, de relacionarnos con nuestra rabia. Aprendiendo a caminar hacia la escucha de su mensaje más profundo, invitándola a que no nos invada, pero sin ignorarla. "Negociando" con ella. Abriendo la puerta a recuperar su función como aliada y no como enemiga.

No vamos a salir de este taller sin rabia (¡menos mal!) pero si con un nuevo concepto acerca de la misma (espero).Como ser humano...con mi rabia, con mi miedo, con mi dolor, con mi alegría, con mi sorpresa, con mi coraje... con todo mi "lote emocional", que me permite seguir viva... me es un placer invitaros a conocer cómo podemos seguir adelante, viviendo y relacionándonos con nosotros mismos, con los demás y con el mundo, de la mano de nuestras emociones, permitiéndoles tener el espacio que necesitan y permitiéndonos darles el espacio que necesitamos darles.

Nosotros, no somos nuestras emociones (pero están con nosotros, para algo).

Nuestras emociones, en su esencia, pulsan por nuestro bienestar (aunque a veces no sea fácil de ver).

Os dejo con una frase que me sigo diciendo, día tras día. Frase que al principio me causaba frustración y enfado al leer, porque me sentía lejos de comprender. Y que ahora, me sirve de recordatorio cuando entro en una emoción que me resulta difícil de llevar.

Aquí mi propuesta de empezar a vislumbrar, aunque sea de lejos, que en nuestras emociones, hay una fuente de sabiduría:

 

"Cuando se puede encontrar el amor allí donde parece que el amor no está es cuando se devuelve a cada emoción su sentido más profundo. Es cuando puede accederse a la sabiduría de las emociones."

(Norberto Levy)