Ciclo Menstrual y Terapia Corporal

En el trabajo con el ciclo menstrual hay diversos enfoques y me gustaría compartir con vosotras el mío,

que es fundamentalmente CORPORAL.

¿Y qué quiere decir esto?

Que en el trabajo que propongo, aprendemos a afinar y ampliar la escucha de nuestro cuerpo.

Que en nuestros cuerpos, desde donde vivimos la experiencia de vida, están todos los secretos, herramientas, recursos y potencialidades que desarrollamos y que están esperando a ser expandidos. También se encuentran todas nuestras memorias y ecos de las experiencias vividas, tanto las que nos han producido bienestar como aquellas que han resultado más o menos traumáticas o dolorosas.

En nuestros cuerpos, podemos leer nuestra historia y trascenderla.

Que en el ciclo menstrual (no sólo los días de sangrado o durante la fase premenstrual sino en el ciclo completo) se producen cambios físicos y emocionales que nos acercan al conocimiento intuitivo (que es aquel que se adquiere de manera inmediata sin que medie aún el razonamiento, por medio de la sensación, percepción, repetición...en definitiva por medio de la experiencia sentida), algo que podemos aprovechar para saber quiénes somos, cómo sentimos, cómo hemos aprendido a actuar y accionar con esto que nos ocurre.... y trascenderlo, encontrando maneras más respetuosas y libres con nuestra única y peculiar manera de vivirnos.

Que en nuestro cuerpo, tenemos no sólo nuestro último y más íntimo hogar, sino una fuente de tesoros a descubrir, y es desde el acercamiento amable, dulce, sereno y confiado desde donde emergen.