Comenzar terapia (brindo por el coraje....)
Hoy Brindo por el CORAJE del que me permitĆs ser testigo cĆ³mplice al decidir mirar hacia dentro...
La decisiĆ³n de comprometerse con el proceso terapĆ©utico es un acto que implica una gran dosis de coraje.
Coraje para reconocer frente a una mirada desconocida y frente a nosotros mismos que no estamos tan bien, que no logramos salir solos del agujero, que en un lugar estamos perdidas aunque en otros quizƔs funcionemos bien. Coraje para escuchar esa pequeƱa e intensa vocecilla interna de esperanza y atenderla a pesar (o con) la desconfianza (desconfiamos del otro, de la terapia, de la vida...de nosotras mismas).
Hemos mamado que debemos ser felices por encima de todo, que tenemos que saber salir solos de bloqueos y conflictos porque "ya somos mayores", que hay un tiempo determinado para estar triste o enfadados y que una vez pasado este margen debemos medicarnos o pensar que no hay nada que hacer, que tampoco debemos sentir miedo porque es de cobardes y que amarnos, es ser egoĆstas.... Actuamos asĆ un personaje tan alejado de lo que somos que muchas veces (tantas) a pesar de mostrar una sonrisa externa (o una vida aparentemente exitosa) por dentro estamos destrozados. A pesar de gastar grandes cantidades de energĆa y esfuerzo para "hacer las cosas bien" hay algo que no acabamos de lograr. Y seguimos buscando (bendito impulso vital). Extenuadas, descreĆdos...Reventadas de sernos infieles, de abandonarnos, de desconocer quiĆ©nes somos, de luchar por cambiar las cosas y no ver resultados, de decirnos mensajes poco amorosos y de aplicar el lĆ”tigo sin piedad hacia nosotros mismos. Perdidas. Perdidos. Y en un lugar interno, muy solos.
Por eso es tan valiosa esa gotita de fe (porque entrar en terapia es, en cierto modo, arrojarnos al vacĆo, y esto requiere de la fe suficiente) que nos nutre lo bastante como para iniciar terapia.
Es esa gotita minĆŗscula de pura esencia (que para mi es tan valiosa como un perfume elaborado tal y como describe Patrick SĆ¼skind -en su novela "El perfume" - el arduo y laborioso proceso de extraer por destilaciĆ³n una gota del mĆ”s puro perfume a partir de kilos y kilos de flores) la que debemos (si es que "debemos" algo, cosa que dudo) cuidar, honrar, expandir... es el hilo suelto del que tirar, la mano que pide ayuda, la parte que aĆŗn confĆa, que aĆŗn se ama, que desea, que busca, que estĆ” tan viva... que nos pertenece por existir y que nadie puede matar. Es desde ella que se inicia la aventura acompaƱada de bucear en el interior sin saber lo que se puede encontrar. Es desde ella desde donde pueden ir creciendo nuevas maneras de ver y estar en la vida.
Es desde ella que se trenza el puente entre lo que realmente somos y nuestra valiosa y aprovechable mĆ”scara. Desde ella y CON miedo, desconfianza, dudas, vacĆo, esperanza, ganas, amor.. con TODO lo que vaya ocurriendo aprendiendo a transmutarlo para integrarlo saludablemente como parte del proceso terapĆ©utico y sobre todo como parte del proceso vital.